Capano
tiene dos partes, la parte frontal que da al Lago Titicaca, pero en la
posterior a ella está el cerro Allan Pukara y en ella se mantiene una gran
cantidad de andenes, terrazas, arbustos. Hasta de mil novecientos ochenta y
seis, la población que habita esta comunidad estaba a punto de acabar con todos
los arbustos que existía en ella, debido a que no existían árboles que puedan
satisfacer la demanda de leña.
Pero en
ese año, posterior a la recordada inundación de ese año, el proyecto
CENFOR/FAO/HOLANDA y el ministerio de agricultura promueven la introducción y
siembra de árboles ajenos y exóticos como el eucaliptos en sus distintas
variedades, cipreses, pinos, que de alguna manera salvan la desaparición de
T'olares o los arbustos y árboles de la zona: el colle en sus distintas
variedades.
Capano
hoy en día está cubierto de plantaciones de árboles como es el eucaliptos,
ciprés, y alguna que otro pino, al que recurre el poblador para abastecerse de
leña.
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